La portada de esta edición y cada una de las ilutraciones en su interior estuvieron a cargo de nuestro talentoso amigo Matías Tolsà. Los suscriptores de la revista, además, participarán del sorteo de originales del artista.
¿Se afilió? ¡Se afilió! Para tener cerca a Karina Milei, la mujer de la guillotina, Seselovsky fue a un acto de afiliación, la quiso esnifar y plantó su firma en la ficha libertaria.
Por primera vez, Paloma Fabrykant abandona los subsuelos de las redacciones, se saca el traje de cronista callejera y analiza la manera en la que el odio —de las calles y de las redes— nos lleva puestos a todos.
Una mujer cae desde lo alto del mirador de un pueblo patagónico, y su muerte se suma a una cadena de otras muertes misteriosas que ocurrieron en el lugar. Otro capítulo imperdible de este policial escrito por Pablo de Santis.
Una mujer y un hombre están destinados a vivir el uno junto al otro. Pero nunca se vieron cara a cara. Tampoco viven en la misma ciudad. Ni siquiera en el mismo país. Están separados por una distancia extraña y deforme.
Cenas, vinos y criptos reúnen a un grupo de hombres dispuestos a arriesgarlo todo en una competencia. El cuento «La cata», de Roald Dahl, es reversionado por Willy van Broock en una nueva y grandiosa ficción sonora.
Volvimos a retar a una figura clave de la escena local para que se anime a escribir una historia trágica, y Laila Roth aceptó el desafío sin pestañear. La comediante se zambulló en una herida íntima: la muerte de su madre y una herencia insólita guardada en la heladera.
Hace un tiempo organizamos el primer Congreso Orsai 8×1000, donde ocho referentes de la narrativa compartieron ideas y experiencias con mil profesores de lengua y literatura. En este ensayo, Guillermo Martínez nos revela sus secretos para escribir los primeros párrafos de un texto y que el lector se quede hasta el final.
¿Qué sería del cine sin la figura del operador? Quintín nos presenta a Álvaro Arroba, un titiritero del cine con el don de detectar referentes del cine actual que desafían las convenciones.
De adolescente, Gabriela Wiener corría a buscar su novela de José Donoso cada vez que se quedaba sola en su casa. Hoy se pregunta: «¿Soy de la última generación que se masturbó con libros?». Una crónica sobre lecturas fundacionales que marcan la adolescencia, el despertar literario y sexual.