Con una cautivadora portada de Poly Bernatene, la séptima Orsai de la segunda época nos trae las plumas de Pino Aprile, Pedro Mairal, Matías Fernández Burzaco, Gabriela Wiener, Santiago Llach y Mariana Enriquez, entre muchos más.
A la vez que se publicaba esta edición de Orsai, la pandemia mundial arreciaba y nosotros descubríamos que, además de libros y revistas, también podíamos hacer cine.
Pino Aprile se hace la misma pregunta que nos hacemos todos, pero él se toma el trabajo de intentar encontrar la respuesta. Y, para eso, parte desde la teoría de la evolución de Darwin.
Ana García Blaya vuelve a aparecer en Orsai con una crónica íntima sobre su padre. Una historia con la que es imposible no conmoverse. Tan imposible como no querer haber sido amigo de «Blaya».
Una mujer despampanante le encarga un trabajo a Juan Sklar: escribir la biografía de su excéntrico abuelo. La vida del tipo es atractiva, pero la nieta más.
Malena Pichot escribió estos cuentos cuando tenía menos de doce años y su papá los guardó por años. Durante la pandemia, los volvió a encontrar en un cajón y en Orsai tenemos el privilegio de sacarlos a la luz.
Matías Fernández Burzaco escribe, sin tapujos y con mucha crudeza, cómo es el día a día de una persona con una enfermedad rarísima, en medio de la paranoia que despierta la pandemia.
Una crónica de Gabriela Wiener sobre cómo vivió su familia la pandemia por el Coronavirus cuando el primer día de encierro su hijo Jaime ya tenía 38 de fiebre.
Santiago Llach escribe este cuento lleno de viajes y recuerdos que le narra al padre, en la búsqueda opaca de querer develar un misterio, un amor, capaz el pasado.
Una mujer empieza a trabajar en Here, una empresa que garantiza la libertad de expresión. El método es sencillo: si querés manifestarte y no podés porque estás trabajando, no te preocupes, otra persona va en tu nombre.
